Tattoo art – Piercing – Estudio de tatuajes profesional en Vitoria – Gasteiz
Que los tatuajes todavía molestan a algunas personas es un hecho. Pero que te expulsen de un bar por tener tatuajes a día de hoy es algo incomprensible.
Eso fue lo que le ocurrió a Aaron en el restaurante HeadQuarters Viaduct de Auckland en Nueva Zelanda.
Aaron salió a cenar con un amigo y cuando llegaron al restaurante uno de los camareros les acompaño hasta su mesa. Hasta aquí todo bien. El problema empezó cuando apareció unos minutos después el dueño del local Leo Molloy quien les invitó a levantarse y marcharse del local.
Los amigos que no entendían nada le pidieron una explicación y les dijo que Aaron no era el tipo de cliente de su local debido a sus tatuajes. En opinión de Molloy Aaron parecía un skin head, un neo nazi, sus tatuajes cubrían todo su cuerpo y cabeza y consideraba que eran inapropiados.
Aaron enfadado se marchó no sin antes según reconoció el mismo, insultar y dedicar alguna que otra peineta al intransigente propietario del local.
La cosa no quedó ahí porque Aaron publicó en redes sociales lo sucedido y de nuevo Molloy entró al trapo diciendo que no se arrepentía de haberle expulsado de su local, criticó de nuevo sus tatuajes y manifestó que no le importaba nada lo que la gente dijera pues era su local y estaba en su derecho de hacer lo que hizo.
Lamentablemente no era la primera vez que este individuo tenía problemas en su local debido a su inaceptable concepto de «es mi local y hago lo que quiero». Muchos clientes apoyaron a Aaron y comentaron otras experiencias negativas en el restaurante con Molloy.
A ver si recapacita y no vuelve a tener problemas con sus clientes por conceptos totalmente subjetivos y fuera de toda lógica.
Auckland nos pilla un poco lejos pero si algún día nos acercamos a Nueva Zelanda tener por seguro que no pisaremos ese local.
Esperamos que os haya gustado este post y como siempre… Gracias por seguirnos!!!